República Centroafricana (www.pastoralsiglo21.org) 28 de septiembre del 2018.- Debido a la extrema situación de violencia y crisis humanitaria que se vive de manera recalcitrante en este país, el Vaticano ha pedido a la ONU que asuma la responsabilidad de brindar el respaldo para facilitar la estabilización del país.
Mons. Paul Richard Gallagher el Secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede, hizo intervenciones durante la tercera asamblea de Naciones Unidas en las que llamó la atención hacia el estado de emergencia en la República Centroafricana y también sobre el control de enfermedades no transmisibles.
“La actual crisis política y humanitaria en la República Centroafricana sigue siendo motivo de gran preocupación para la Santa Sede, especialmente porque esta situación ocurre con muchas otras en el mundo y revela en gran medida la incapacidad de la comunidad internacional, para reunir la voluntad política para abordar el conflicto de manera efectiva”, dijo.
La situación en el norte y centro es de un conflicto constante y en el sur han aumentado los combates.
Los ciudadanos se ven obligados a desplazarse hacia las otras naciones vecinas y un gran número personas, en especial niños, son víctimas de los movimientos terroristas emergentes en el país.
“Las consecuencias de muchos años en continuas tensiones están causando estragos en la vida de millones de civiles, dejando a miles de víctimas y cientos de miles de desplazados internos y refugiados huyendo a los países vecinos de Camerún, Chad, la República Democrática del Congo y la Repúblicade Congo. Como de costumbre, las mujeres y los niños suelen ser las primeras víctimas en situaciones de conflicto.
En cuanto a la salud, Mons. Gallagher dijo: “Como se sabe, las enfermedades no transmisibles están relacionadas con cuatro factores de riesgo principales, a saber, el consumo de tabaco, el consumo nocivo de alcohol, una dieta no saludable y la inactividad física. Así es como estas enfermedades no transmisibles pueden paradójicamente convertirse en transmisibles, a través de la imitación de estilos de vida y conductas poco saludables, especialmente por parte de los jóvenes y los impresionables”.