“𝑸𝒖𝒊𝒆𝒓𝒐 𝒊𝒏𝒗𝒊𝒕𝒂𝒓𝒍𝒆𝒔 𝒂 𝒂𝒑𝒐𝒚𝒂𝒓 𝒄𝒐𝒏 𝒔𝒖 𝒐𝒓𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒂 𝒁𝒂𝒊𝒓𝒂”.
La tarde de este pasado viernes 13 de enero, el Arzobispo de Monterrey, Mons. Rogelio Cabrera, presidió la Santa Misa con motivo del nombramiento, profesión de fe y juramento de la nueva secretaria canciller de la Arquidiócesis de Monterrey.
En la homilía el Arzobispo de Monterrey, invitó a orar por Zaira y señaló la cualidad más importante en esta responsabilidad.
“Quiero invitarles a apoyar con su oración a Zaira que inicia esta responsabilidad de Secretaria y Canciller de nuestra Curia diocesana”.
“De un administrador la cualidad más importante es la fidelidad. Hoy precisamente es el autor a la carta a los Hebreos previene a su pueblo y les dice <<no vayan a caer en la infidelidad>>”.
El Arzobispo compartió posteriormente, en qué consiste la fidelidad.
“Primero en el caso de un oficio como este, es fidelidad a Dios, por eso hemos hecho este acto que aunque es administrativo, pudimos haberlo hecho en la oficina, he querido que sea en este ambiente de Eucaristía, para que cada uno de nuestros servicios en la curia, quede en esta atmósfera de la fe”.
“El canciller tiene un cargo de confianza y amistad, por su puesto que ser fiel no es lo mismo que ser cómplice, el cómplice es aquel que se une para hacer daño, esa no es una virtud de alguien que tiene una tarea en la iglesia, es la de buscar siempre el bien, la de buscar respetar siempre la buena fama de las personas”.
“Canciller es el que tiene el sello, de ahí viene el nombre, en la antigüedad el sello era la firma, el que cuida la autenticidad, el que es fiel al que le da la confianza, ella certifica mi firma, por eso en todo documento firmo yo y firmará ella, dará testimonio de que es lo que yo quiero lo que he decidido”, añadió.
“La cancillería es un trabajo delicado, más en estos tiempos en los que lo hay confidencialidad, donde todo mundo quiere saber lo que no es de su incumbencia, pero hay esta ansiedad de meterse en la vida de otros, en la vida social, en la vida de la Iglesia, por eso es muy importante este servicio que hace Zaira junto con ustedes, por qué ella no está sola, la cancillería es todo un equipo de servicio a la comunidad”.
Finalmente, Monseñor Rogelio agradeció a Zaira que haya aceptado y manifestó que desde hace tiempo él quería que esta responsabilidad fuera llevado a cabo por una mujer laica”.

Lic. En Comunicación y Desarrollo Organizacional Maestro en Métodos Alternos en Solución de Conflictos.
