Roma (www.pastoralsiglo021.org) 28 de abril del 2018.- En el congreso “Confesión, Jóvenes, Fe y Discernimiento Vocacional, el Cardenal Mauro Piacenza, penitenciario mayor, dijo que “un joven que pide confesarse lleva a cabo un acto revolucionario porque reconoce la insuficiencia del mundo para responder a las preguntas”.
“Un joven creyente, hoy, es el verdadero anti-conformista”, añadió al inaugurar el evento realizado esta semana.
Porque un joven “que llega a pedirle a la Iglesia y a su sacerdote que celebre el sacramento de la reconciliación cumple un acto radicalmente revolucionario, contra-cultural. Aún sin saberlo, reconoce y afirma la propia no autosuficiencia, reconoce y afirma la insuficiencia del mundo para responder a las propias preguntas; reconoce y afirma la necesitad de un Salvador y que esta salvación pasa a través de la estructura histórica y mística del Cuerpo eclesial”.
De acuerdo a Vatican Insider, el purpurado dijo que, a diferencia de los adultos, quienes vivieron en la revolución del 68 cierto protagonismo, ahora los jóvenes no determinan el clima de la vida social; es más, están obligados a sufrirlo y, a menudo, a integrar sus negatividades.
“Sería bueno que, como pastores, no fuéramos conscientes del alcance simplemente ritual o sacramental de los gestos de nuestros jóvenes, sino de su alcance profético, evangélico y, por ello, histórico y cultural”, agregó.