Por Juan Pablo Vázquez Rodríguez
Misa Exequial del Padre Agustín Rojano
Monterrey, N.L. (www.pastoralsiglo21.org).- 8 de Julio 2019. Una gran multitud de fieles se dieron cita en la Casa de los Misioneros de Familia y Juventud para despedir al Padre Agustín Rojano con la celebración de la Santa Misa.
La Eucaristía fue presidida por el Arzobispo de Monterrey, Mons. Rogelio Cabrera López, concelebrada por Mons. Heriberto Cavazos y los sacerdotes Misioneros de Familia y Juventud.
Mons. Rogelio invito durante la homilía a continuar con la misión de vivir la alegría del Evangelio, la cual el padre Agustín Rojano siempre se esforzó por compartir.
“Dice la escritura que orar por los difuntos es una cosa santa, y que mejor que hoy oremos por nuestro hermano Agustín, con admiración, con reconocimiento y con cariño, ese es el mejor regalo que le podemos dar al Padre Agustín, una oración cariñosa, una oración agradecida, una oración con todo el corazón”.
“Ustedes que disfrutaron la amistad del padre Agustín, que han heredado sus sueños, sus inquietudes pastorales pueden percibir claramente, que toda propuesta viene del Evangelio, que lo que el Padre Agustín inició, tiene ahí su fuente única, que es la persona de Cristo”.
“El padre Agustín, fue educado en la escuela de San Bosco, ya saben ustedes que el propósito de San Juan Bosco fue siempre llevar la Alegría a los niños y jóvenes y toda persona, hacer sonreír, hacer reír a la persona humana, ese es el objetivo del Evangelio, Cristo ha venido al mundo para que podamos sonreír para que podamos ver al mundo con otro ángulo, porque los que no conoces a Cristo la vida es una tragedia”.
“Todo lo que hizo el padre Agustín con ustedes era llevar un solaz de alegría, para recordarles que la Iglesia es un oasis, que Cristo ha puesto en medio del mundo para sentir, que la cercanía de Cristo, que la cercanía de María, fortalece la vida de cada uno de nosotros”.
Lic. En Comunicación y Desarrollo Organizacional Maestro en Métodos Alternos en Solución de Conflictos.