Ciudad del Vaticano (www.pastoralsiglo21.org) 27 de abril del 2019.- Miles de inmigrantes centroamericanos necesitan ayuda al encontrarse varados en la frontera de México con Estados Unidos, de ahí la necesidad de que la Iglesia continúe apoyándolos a través de sus diócesis y congregaciones.
Por esa razón, el Papa Francisco envió 500,000 dólares, informó el sitio del Óbolo de San Pedro, para ayudar a los migrantes en México que se encuentran en total desamparo.
Esa cantidad se distribuirá entre 27 proyectos de 16 diócesis y congregaciones religiosas mexicanas que han solicitado ayuda para poder ofrecerles a los hermanos artículos de primera necesidad, alimentos y vivienda.
«En los últimos meses, se lee en el comunicado del Obolo de San Pedro, miles de migrantes han llegado a México, tras haber recorrido más de 4 mil kilómetros a pie y en vehículos improvisados desde Honduras, El Salvador y Guatemala. Hombres y mujeres, a menudo con niños pequeños, huyen de la pobreza y la violencia, esperando un futuro mejor en los Estados Unidos. Pero la frontera de Estados Unidos permanece cerrada para ellos».
“En 2018, seis caravanas de migrantes entraron a México, haciendo un total de 75,000 personas; también se anunció la llegada de otros grupos. Todas estas personas quedaron varadas, sin poder ingresar a los Estados Unidos, sin hogar ni medios de subsistencia. La Iglesia católica acoge a miles de ellos en los hoteles de las diócesis o congregaciones religiosas, proporcionando lo necesario para vivir, desde la vivienda hasta la ropa”. «La cobertura de los medios ante esta emergencia ha ido disminuyendo y, en consecuencia, la ayuda a los migrantes por parte del gobierno y los particulares también ha disminuido».
De los 27 proyectos de asistencia a migrantes, 13 ya han sido aprobados para las diócesis de Cuautitlán, Nogales (2), Mazatlán, Querétaro, San Andrés Tuxtla, Nuevo Laredo (2) y Tijuana; así como para los Scalabrinianos, la Congregación de los Sagrados Corazones de Jesús y María y las Hermanas Josefinas.